Cada embarazo y parto son únicos. Por eso, es importante conocer las ventajas y los posibles riesgos de cada opción antes de tomar una decisión junto a tu equipo de salud.
Cada embarazo y parto son únicos. Por eso, es importante conocer las ventajas y los posibles riesgos de cada opción antes de tomar una decisión junto a tu equipo de salud.
Recuperación más rápida, podrás levantarte, moverte y cuidar a tu bebé en pocas horas.
Menor pérdida de sangre, el parto natural implica menos riesgo de anemia o transfusión.
Fortalece el sistema inmune del bebé, el parto natural implica menos riesgo de anemia o transfusión.
Menor riesgo de infecciones, al no ser una cirugía, el cuerpo se recupera de manera más natural.
Mayor conexión y protagonismo, muchas mamás sienten que el parto natural brinda una sensación de logro y empoderamiento.
Acompañamiento cercano, tu pareja o persona significativa puede estar contigo durante todo el proceso.
Dolor durante el trabajo de parto, que puede manejarse con técnicas o anestesia.
Desgarros o episiotomía, que se tratan con sutura y cuidados locales.
Parto instrumental o cesárea de urgencia, si el bienestar del bebé o la madre lo requiere.
Seguridad en casos complejos, es la mejor opción cuando existen condiciones médicas que hacen riesgoso al parto vaginal.
Puede reducir, ciertos problemas del piso pélvico.
Disminuye el riesgo de transmisión de algunas infecciones, como VIH o hepatitis.
Recuperación más lenta, que requiere más tiempo para caminar, amamantar o cuidar al bebé.
Mayor riesgo de infecciones y sangrado, al ser una cirugía mayor.
Riesgo en embarazos futuros, como placenta previa o rotura uterina.
Posibles efectos de la anestesia, náuseas o mareos, que suelen ser temporales.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere que las cesáreas representen entre el 10% y el 15% de los partos.
En nuestro país, las cifras son mucho más altas, por lo que resulta clave informarse y conversar con tu médico para decidir la opción más segura y adecuada para ti y tu bebé.
Cada historia de parto es distinta. No existe una única forma correcta de nacer, sino la que garantiza el mayor bienestar para la madre y su hijo.
Agenda una conversación con tu profesional de salud y resuelve todas tus dudas.